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PARO MUNICIPAL/ DANIEL VIDAL DIJO QUE UPCN Y APAP SON GREMIOS FACILMENTE SOBORNABLES

05.05.2016 06:22

Los empleados municipales de Puerto Deseado completaron ayer cuarenta
y ocho horas de retención de tareas, medida que fue definida en una
asamblea del SOEM. La protesta afectó parcialmente a la recolección de
residuos, lo que llevó al gobierno local a establecer un esquema de
emergencia. También se produjeron dificultades en establecimientos
educativos donde existe personal de limpieza dependiente de la comuna,
por lo que debieron suspender las clases.
        Daniel Vidal, secretario general del gremio, cuestionó la actitud de
los paritarios de APAP y UPCN en el ámbito provincial, al considerar
que "fueron fácilmente sobornables por parte del gobierno de Alicia
Kirchner y no son los representativos de la provincia de Santa Cruz".
Coincidió con el reclamo de un cincuenta por ciento de incremento
salarial planteado por los sindicatos provinciales.
        "Más allá de que hemos hablado en forma constante con el intendente
González, no ha hecho más que dilatar y no se ha concretado la
apertura de la mesa paritaria", resumió, planteando que "los
trabajadores municipales sabemos que hay todo un período de adaptación
del gobierno municipal y provincial, pero llega un momento en que uno
no puede seguir esperando en esta transición".
        Denunció que "mis compañeros han observado que tenemos ingresos (de
personal) en el municipío, y son cosas inentendibles". "Al mismo
tiempo escuchamos que se le corta Internet y la telefonía a la
municipalidad porque hay una deuda de trescientos mil pesos...
inentendible", calificó.
        "Los trabajadores siempre hemos soportado, pero cuando nos
encontramos con este tipo de tozudez o de dilatar por parte del
intendente, eso no nos deja del todo tranquilos", aseveró, revelando
que el intendente Gustavo González "estuvo el viernes pasado en el
corralón municipal, pidiéndoles a los trabajadores que no vayan a una
medida de fuerza, y lo hizo antes de reunirse con el sindicato". "Hay
un descontento generalizado... mientras el intendente estaba en el
corralón, los mismos trabajadores me estaban llamando por teléfono;
son actitudes que dejan mucho que desear", criticó Vidal.

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